El mundo genera 300 millones de toneladas de residuos plásticos cada año. 300 millones de toneladas de basura es sin duda un gran desastre para el medio ambiente, pero también una enorme riqueza. En comparación con los materiales nuevos, los plásticos reciclados tienen una apariencia y un rendimiento inferiores, pero los abrillantadores ópticos pueden ayudar a mejorar su valor.

De hecho, el rendimiento de los plásticos reciclados no ha bajado demasiado, y el principal problema es la calidad del aspecto. Tomemos como ejemplo las bolsas tejidas de polipropileno. El color de las bolsas tejidas hechas de plástico reciclado siempre es amarillo o tenue. Sin embargo, la aparición de los blanqueadores ópticos ha cambiado por completo esta situación.

Los blanqueadores ópticos en sí no tienen color, utilizan el principio complementario de luz de color para blanquear. El color de la bolsa tejida es amarillo y tenue. La razón fundamental es que la luz amarilla reflejada en la superficie de la bolsa tejida es demasiada y la cantidad total de luz emitida no es suficiente. Los abrillantadores fluorescentes absorben los rayos ultravioleta invisibles y emiten una fluorescencia azul-violeta visible a simple vista, que se puede decir que es la némesis del amarillamiento. La luz amarilla y la luz azul son colores complementarios. Cuando los dos se encuentran, se convierten en luz blanca. Además, la luz ultravioleta invisible se convierte en luz visible, lo que aumenta virtualmente la reflexión total del propio producto.